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BMW se ha comprometido a seguir invirtiendo en motores de combustión y tecnología híbrida, al tiempo que advierte de un "viaje en montaña rusa" en la transición de Estados Unidos a los vehículos eléctricos tras el regreso de Donald Trump como presidente. Jochen Goller, miembro de la junta directiva, dijo que el grupo sigue siendo optimista sobre las ventas de vehículos de gasolina e híbridos enchufables en Estados Unidos, incluso si la demanda de vehículos eléctricos se desacelera en los próximos años debido a los cambios de política bajo la nueva administración.

"Creo que sería ingenuo creer que el paso hacia la electrificación es un camino de una sola dirección. Será un viaje en montaña rusa", dijo Goller, que está a cargo de clientes, marcas y ventas, al Financial Times en la sede de BMW en Múnich. "Es por eso que estamos invirtiendo en nuestros motores de combustión", dijo. "Estamos invirtiendo en híbridos enchufables modernos. Y seguiremos lanzando coches eléctricos".BMW se enfrenta a importantes desafíos en el mercado chino, con una caída del 13% en las ventas en medio de una intensificación de la competencia de precios y un creciente dominio de las marcas nacionales.

Los analistas señalan que, si bien la empresa todavía ve a China como un mercado en crecimiento, las presiones de precios y un sector automotriz superpoblado plantean riesgos constantes para el posicionamiento a largo plazo de BMW.

Es probable que sea aún más difícil para BMW y otras compañías automotrices ganar participación de mercado en el mercado chino con el último anuncio de BYD. El fabricante de automóviles chino dijo que ofrecerá su avanzada tecnología autónoma "God's Eye" en vehículos eléctricos de mercado masivo como el Seagull de $ 9,500, mientras se expande globalmente con iniciativas de vehículos eléctricos basadas en el gobierno.