Desde sus inicios, Android ha llamado la atención como alternativa para ordenadores, pero su adaptación al mundo PC no ha sido sencilla pese a su base Linux. La compañía noruega FXI Technologies ha roto estas barreras con Cotton Candy, un revolucionario dispositivo del tamaño de un pendrive que transforma televisores y monitores en equipos con Android y Ubuntu.
Diseño compacto, potencia sorprendente
Con apenas 8 cm x 2,5 cm, este pequeño gadget incluye:
-
Conexión USB (para alimentación y periféricos)
-
Salida HDMI (para conectar a pantallas)
-
Procesador Cortex A9 de 1,2 GHz y 1 GB de RAM
-
Chip gráfico con soporte 1080p (reproducción y codificación)
-
WiFi, Bluetooth y ranura microSD para ampliar almacenamiento
¿Para qué sirve?
-
Lleva Android 4.0 (Ice Cream Sandwich) y Ubuntu a cualquier pantalla con HDMI.
-
Ideal para SmartTVs obsoletas o monitores sin sistema operativo.
-
Permite navegar, usar apps y convertir televisores en centros multimedia.
Limitaciones
Al no estar certificado por Google, carece de acceso al Google Play Store, aunque permite instalar apps mediante APKs o tiendas alternativas como F-Droid.
Precio y disponibilidad: Originalmente lanzado en 2012, su precio rondaba los $200 USD. Hoy puede encontrarse en mercados de segunda mano como una curiosidad tecnológica pionera.
Fuente: The Verge | Web oficial de FXI